El bullying en niños es un problema muy serio que no debe dejarse de lado. Las víctimas de acoso o abuso escolar viven en un mundo difícil. El tormento psicológico que pueden sufrir puede resultar una locura para ellos. Si eres padre, no solo deberás darle todo tu apoyo a tu hijo, sino que querrás que aprenda a cuidarse a sí mismo.
Para ello, en el siguiente artículo de Clínica Internacional, te brindaremos algunos consejos que podrías darles a tus pequeños para que puedan afrontar y parar este problema que afecta a muchos menores, especialmente durante la etapa escolar.
Recuerda, hablar con tus hijos sobre cómo pueden lidiar con la intimidación antes de que suceda los ayudará a mantenerse a salvo.
Lenguaje corporal seguro
Una de las mejores maneras de prevenir el bullying en niños o el acoso escolar es asegurarse de que tus hijos tengan una autoestima saludable y se comporten con confianza. Tener confianza en uno mismo implica tener una buena postura, caminar con un propósito y hacer contacto visual con quienes los rodean.
Por el contrario, si los niños se agachan y mantienen sus ojos desviados, esto los hace parecer débiles y un objetivo fácil.
Trabaja con tus hijos en estas técnicas. Recuérdales que incluso cuando no se sientan seguros, como cuando entran por primera vez a un comedor lleno de gente, deben caminar con confianza.
Confianza en sus instintos
Enseña a tus hijos a ser conscientes de su entorno. Haz que guarden sus teléfonos celulares y miren a su alrededor. ¿Hay un grupo de chicos de aspecto rudo en la esquina del patio de recreo o en el paradero? Que se alejen.
Ser consciente de lo que sucede a su alrededor y confiar en sus instintos ayudará a proteger a tus hijos del acoso escolar o del bullying en niños.
Asegúrate de que tus hijos sepan que no es cobardía alejarse. En su lugar, se requiere valor para alejarse de una situación que se está intensificando
Crear conciencia
A veces los niños sienten que los adultos nunca hacen nada, así que, ¿por qué molestarse en informarles sobre la incidencia del bullying o acoso escolar?
Si bien hay casos en que los adultos no reconocen la gravedad de una situación, es más frecuente que no se den cuenta de lo que está sucediendo realmente.
Cuando hablamos de bullying en niños, los agresores usan la agresión relacional para infligir su violencia de manera sutil y socialmente aceptable, que tiende a no registrarse en el radar de un adulto. Es por esto que debes enseñarle a tu hijo que confíe en ti.
Asimismo, sé claro que decirle a un adulto sobre el acoso escolar no es una marca de cobardía, sino más bien un movimiento audaz y poderoso.
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No al aislamiento
Tu hijo no debe preocuparse de ser etiquetado como chismoso si le cuenta a un profesor o tutor que lo están molestando o que alguien más está pasando por un momento difícil debido al bullying.
El aislamiento es un método de intimidación que muchos niños usan para que no sean delatados.
De hecho, decirle a tu hijo que puede contarle todo a un adulto es una manera de comenzar a reequilibrar la dinámica de poder y evitar el bullying en niños. Cuando un agresor se da cuenta de que no podrá mantener a una víctima aislada, inmediatamente comienza a perder el control.
Actuar rápidamente
Cuanto más tiempo un agresor tiene poder sobre una víctima, más fuerte se vuelve el control. A menudo, el bullying en niños comienza en una forma relativamente suave: insultos, burlas o agresiones físicas menores.
Después de que el acosador ha confirmado que una víctima no va a decírselo a un adulto y a defender sus derechos, la agresión empeora. En otras palabras, cuanto más piense un agresor que puede atacar a una víctima sin una respuesta, más lo hará.
Enséñale a tu hijo a tomar medidas contra el acosador desde un principio: es la mejor manera de ganar y tener poder.
Usar un lenguaje simple y sin emociones
¿Por qué deberías enseñarle a tu hijo a usar respuestas «no emocionales»? Las indicaciones de que una persona puede verse afectada emocionalmente indican al agresor que podrá ejercer poder fácilmente.
Al alentar a tu hijo a responder sin enojo ni miedo ante el bullying permitirá que retrate confianza. El agresor, a su vez, detectará menos posibilidades de ejercer el control.
Cómo prevenir el bullying en niños
- Fomentar la comunicación asertiva en casa. El momento más significativos es a la hora de alimentarse, donde padres e hijos comentan acontecimientos diarios. Permite que tu hijo entre en confianza para que no se calle situaciones incómodas.
- Propicia un ambiente positivo en el hogar al evitar ser tan estricto, fomentar maneras de aprendizaje que fortalezcan la autoestima. Por ejemplo, que tu hijo tenga responsabilidades acordes a su edad, que sea independiente en su alimentación, vestimenta y aseo o decida qué deporte practicar. En casos necesarios, castiga adecuadamente comportamientos agresivos.
- Enséñales a tus hijos a hacerle frente al acoso: reportando sus molestias a los profesores, padres y autoridades, guardando en lo posible evidencia del acoso (mensajes de texto, cartas, etc.).
- Diles que eviten estar solos en los ambientes donde está su acosador.
- Solicita ayuda psicológica si tu niño se encuentra afectado por el bullying. Por ejemplo, no quiere ir al colegio, o siente náuseas o mareos, llora o se deprimen a la hora de ir a la escuela.
- Controla y evita el uso y abuso de celulares y computadoras, en especial de las redes sociales por el ciberbullying.
Es importante señalar que tanto padres como profesores y psicólogos trabajen juntos para erradicar el bullying en niños y el acoso cibernético (donde el agresor se siente fortalecido ante el anonimato).
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