Al estar embarazada, es posible que una mujer experimente una serie de cambios físicos en su cuerpo, como dolores. Uno de estos es el dolor pélvico, un tipo de padecimiento sumamente común en este periodo de tiempo.  No obstante, esto no significa que no pueda ser una molestia para toda madre, sobre todo si es primeriza. Por este motivo, en el siguiente artículo, la doctora Karina Del Águila, especialista en el área de Ginecología, nos explica a qué se debe este dolor. 

¿Por qué el dolor pélvico se hace presente durante el embarazo?

El dolor pélvico, también conocido como pubalgia, es una molestia bastante común. Esto debido a que se estima que el 20% de las embarazadas puede presentar un grado de dolor pélvico durante la gestación. De estas, el 5% lo padece de manera severa y hasta les imposibilita seguir con su vida cotidiana. 

Las causas son multifactoriales; sin embargo, a menudo no existe una explicación clara de su origen. Suele estar ligado a las alteraciones hormonales inherentes al embarazo y los cambios biomecánicos que se experimentan debido al mayor volumen corporal. 

Durante el embarazo aumenta la producción de una hormona llamada relaxina, que ayuda a que los ligamentos estén laxos. Esta laxitud es necesaria para que se produzca el progresivo ensanchamiento de las caderas, con el objetivo de permitir el crecimiento del feto y facilitar su salida en el momento del parto.

Evidentemente, que esto ocurra es bueno y necesario, pero en ocasiones puede producirse un estiramiento excesivo de las articulaciones, como en el caso de la sínfisis. Es entonces cuando la distensión púbica es la causante de tan molestos dolores, que pueden extenderse hacia la parte baja de la de la espalda, las ingles, e incluso hasta la parte superior del muslo.

El aumento del tamaño y del peso del bebé, junto a los cambios de postura que realiza una mujer a medida que avanza el embarazo, pueden producir una sobrecarga en la zona pélvica a la que no se está acostumbrada. La espalda, el abdomen y el suelo pélvico se resienten y es posible que cueste hasta moverse.

Quizás te interese: ¿Qué es el trastorno obsesivo-compulsivo y cómo tratarlo?

¿Qué tan fuerte es este tipo de dolor durante el embarazo?

que tan fuerte este tipo dolor durante embarazo

Debido al dolor pélvico, las madres afectadas se ven limitadas en sus actividades cotidianas, ya que el dolor se intensifica hacia parte de la espalda, caderas e ingles. Asimismo, se acentúa al caminar, subir escaleras, girarse en la cama o abordar un vehículo.

Esa molestia no representa ningún peligro ni problema en el niño que está por nacer, pero sí para la madre, quien es la que enfrenta situaciones que van desde ausentismo laboral y depresión, hasta problemas conyugales y con su entorno. Eso debido a que se trata de un dolor crónico que la afecta anímicamente. Además, no duermen bien, lo que las frustra y las enoja aún más, ya que ven disminuida su calidad de vida.

¿A partir de qué meses suele manifestarse el dolor pélvico?

El dolor pélvico puede manifestarse a partir de cualquier mes de gestación. Sin embargo, es más percibido a medida que el tamaño del útero aumenta. Es decir, cuando el embarazo está más avanzado.

¿Qué factores hacen que una mujer esté predispuesta a sentir dolor pélvico durante el embarazo?

Una mujer estará predispuesta a sentir dolor pélvico durante el embarazo si tuvo antecedentes de molestias crónicas en esa zona, sea por endometriosis o miomatosis uterina. Durante el embarazo, los miomas pueden crecer más y ocasionar una compresión mayor en las estructuras pélvicas adyacentes, desencadenando dolor. 

Quizás te interese: ¿Qué es la neuronitis vestibular? Factores clave para entenderla

¿Cómo se puede aliviar el dolor pélvico?

como puede aliviar dolor pelvico

El manejo del dolor es uno de los aspectos más importantes del tratamiento. Este debe ser efectivo desde las primeras etapas del embarazo para prevenir el círculo vicioso de dolor crónico y estado depresivo.

 Para ese objetivo se indican analgésicos y, en casos severos, otro tipo de terapias como la estimulación nerviosa transcutánea. No obstante, esta está contraindicada en el embarazo por lo que solo se puede recurrir a ella en el postparto. También son de utilidad, en algunos casos, ejercicios abdominales y pélvicos. 

También tenemos las siguientes recomendaciones:

  • Tomar descansos más frecuentes, ya que el reposo alivia sustancialmente el dolor.
  • Evitar levantar pesos debido a que esa acción puede agravar el problema.
  • Sentarse para vestirse.
  • No sentarse con las piernas cruzadas.
  • Dormir sobre un lado y con una almohada entre las piernas.
  • Evitar el sobrepeso antes de embarazarse nuevamente.

Cabe resaltar que la pubalgia no es indicativa de cesárea. Por el contrario, la mayoría de las pacientes son capaces de enfrentar un parto vaginal sin problemas.

Asimismo, a pesar de que sea frecuente sentir dolor en la zona pélvica durante el embarazo, es importante consultar siempre con un médico. Este ayudará a identificar las molestias y a descartar cualquier otro tipo de complicación que podría no estar asociada al dolor pélvico de la gestación. 

Ahora que sabes qué es el dolor pélvico y qué lo causa, es importante que se siga un control adecuado para poder tratar cualquier tipo de molestia mayor que esté relacionada con este. Lo fundamental es que este no debe imposibilitar las actividades diarias de una madre.

En Clínica Internacional te ayudaremos en lo que necesites ya que contamos con los mejores especialistas, quienes tratarán tus problemas de salud. Si deseas reservar una cita, puedes hacerlo a través de nuestra sección Citas en Línea.