La bronquitis es la inflamación e irritación de los bronquios, provoca dificultades para respirar, genera mucosidades y distintos cambios en las vías respiratorias. Esta enfermedad puede ser aguda o crónica.
¿Qué es la bronquitis aguda?
La bronquitis aguda es la inflamación de las membranas mucosas de los bronquios. Por lo general, dura entre dos a tres semanas. Esta es provocada por diversos agentes infecciosos, físicos y químicos, tales como bacterias, virus, polvo, alergias, fuertes gases, humo de cigarro, entre otros.
En niños, la causa más común de la bronquitis aguda es provocada por una infección viral, como un resfriado, aunque también puede ser generada por una bacteria. La bronquitis aguda es siempre una condición bastante leve.
La bronquitis aguda puede desencadenarse después de un resfriado común u otras infecciones virales en el tracto respiratorio superior. También puede generarse en niños con sinusitis crónica, alergias o aquellos con amígdalas agrandadas y adenoideas. La pulmonía también puede generar bronquitis.
Síntomas
- Secreción nasal, frecuentemente cuando la tos comienza
- Dolor al toser o al tomar una respiración profunda
- Malestar general
- Escalofríos
- Fiebre moderada
- Dolor de espalda y músculos
- Sibilancia
- Garganta irritada
- Dolor de cabeza
- Cansancio
- Deshidratación
- Labios o uñas de color azul
- Los niños más pequeños suelen tener vómitos y náuseas
- Tos seca que luego se torna en una tos con abundante flema
Los síntomas de la bronquitis aguda suelen confundirse con otras enfermedades. Solo un especialista puede brindar un diagnóstico detallado. El médico examinará al niño y escuchará sus pulmones. Las radiografías también son utilizadas para descartar cualquier signo de infección severa, como neumonía.
Tratamiento
Los tratamientos específicos para la bronquitis aguda serán determinados por el doctor y se basarán en los siguientes factores:
- Edad del niño, salud integral e historial médico
- Tolerancia del niño a medicamentos específicos, procedimientos o terapias
- Gravedad de la enfermedad
En muchos de los casos, seguir un tratamiento con antibióticos no será necesario, ya que muchas de las infecciones son ocasionadas por virus. Incluso niños que han experimentado tos por más de 10 días no han necesitado antibióticos. Gran parte del tratamiento se basa en mejorar los síntomas del niño, esto puede incluir:
- Analgésicos
- Medicina para la tos
- Mayor ingestión de líquidos
Los antihistamínicos deben ser evitados, ya que puede generar secreciones y empeorar la tos.
Recomendaciones
- Asegúrese de que su niño repose lo suficiente, esto ayudará a que su cuerpo mejore.
- Limpie la mucosidad de la nariz de forma constante.
- Asegúrese de que su niño tome mucho líquido, esto lo ayudará a expulsar con mayor facilidad la mucosidad de las vías respiratorias.
- Evite fumar y que otras personas fumen alrededor de su niño.
- Colocar un humidificador de vapor frío en la habitación, también puede contribuir con la mejora de la enfermedad.
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