¿Tu hijo se distrae mucho y no puede concentrarse? ¿No se comporta como los otros niños de su clase? Probablemente solo sea cosa de la edad, pero quizás sufra de un trastorno conocido como el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
Si ese el caso, entonces tu hijo necesitará toda la ayuda posible para tener un mejor desarrollo. Para ello, en el siguiente artículo de Clínica Internacional, compartiremos contigo mayor información sobre el TDAH y así puedas entender mejor a tu hijo.
Déficit de atención en niños
TDAH significa trastorno por déficit de atención con hiperactividad, uno de los trastornos infantiles más comunes. Los niños con TDAH muestran signos de falta de atención, hiperactividad y/o impulsividad en formas específicas. Estos niños:
- Están en constante movimiento
- Se retuercen y agitan
- No parecen escuchar
- Tienen problemas para jugar en silencio
- A menudo hablan excesivamente
- Interrumpen a otros
- Se distraen fácilmente
- No terminan sus tareas
¿Cómo se diagnostica el TDAH?
Aunque tu hijo parezca tener algunos de los síntomas del trastorno por déficit de atención e hiperactividad, es necesario que un médico diagnostique lo que en verdad tiene.
El diagnóstico es un proceso que toma varios pasos e implica recopilar mucha información de múltiples fuentes. Tanto como tú, tu familia, colegio y personas que rodean a tu hijo deben participar en la evaluación de su comportamiento.
El pediatra preguntará qué síntomas presenta tu hijo, cuánto tiempo hace que comenzaron dichos síntomas y cómo la conducta lo afecta a él y al resto de la familia.
Los médicos diagnostican el trastorno por déficit de atención e hiperactividad en niños después de que haya mostrado seis o más síntomas específicos de falta de atención o hiperactividad de forma regular durante más de 6 meses. El pediatra comparará el comportamiento de tu niño con el de otros de su misma edad.
Asimismo, se le realizará un examen físico e incluso una exploración cerebral no invasiva.
Es muy difícil diagnosticar el TDAH en niños menores de 5 años. Esto se debe a que muchos en edad preescolar tienen algunos de los síntomas que se observan en el TDAH en diversas situaciones. Además, los niños cambian muy rápidamente durante los años preescolares.
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Tratamiento del TDHA
Los planes de tratamiento pueden incluir programas de educación especial, intervención psicológica y ciertos medicamentos.
Los estudios muestran que el tratamiento a largo plazo con una combinación de medicamentos y terapia conductual ayudan a que los niños tengan mejores habilidades sociales.
El tratamiento conductual para los niños con déficit de atención e hiperactividad incluye crear más estructura en su vida, fomentar las rutinas y establecer claramente las expectativas del niño. Entre otras formas de ayuda que pueden beneficiar a tu hijo incluyen:
- Entrenamiento en habilidades sociales. Esto puede ayudar a un niño con TDAH a aprender comportamientos que lo ayudarán a desarrollar y mantener relaciones sociales.
- Grupos de apoyo y entrenamiento en habilidades parentales. Esto incluye apoyo para los padres y ayudarlos a aprender más sobre el TDAH y cómo criar a un niño con este trastorno.
¿Qué tratamiento es mejor para mi hijo?
Las necesidades y la historia personal de cada niño deben ser cuidadosamente consideradas.
Por ejemplo, un niño puede tener efectos secundarios indeseables a un medicamento, haciendo que un tratamiento particular sea inaceptable. Si un niño con déficit de atención e hiperactividad también tiene ansiedad o depresión, lo mejor sería un tratamiento que combine medicamentos y terapia conductual.
10 consejos de estilo de vida
Estos consejos pueden ayudar tanto a tu hijo como a tu familia:
- Unirse a un grupo de apoyo.
- Aumenta la autoestima de tu hijo. Debido a que un niño con TDAH puede tener dificultades para procesar instrucciones y otra información, es probable que lo bombardeen con correcciones, lo que podría disminuir su autoestima. Haz lo que puedas para aumentarla.
- Elogia y premia su buen comportamiento con prontitud.
- Sé consistente con la disciplina y asegúrate de que otros cuidadores sigan tus métodos.
- Haz instrucciones simples y específicas («Cepilla tus dientes. Ahora, vístete»), en lugar de generales («Prepárate para la escuela»).
- Alienta sus fortalezas especiales, especialmente en deportes y actividades fuera de la escuela.
- Establece y sigue las rutinas para las comidas, la hora de acostarse, el juego y otras actividades.
- Tómate un tiempo para jugar y hacer ejercicio con tu hijo en un entorno natural si es posible.
- No permitas que la tarea o el tiempo detrás de una pantalla monopolicen todo el tiempo de tu hijo después de la escuela.
- Simplifica la habitación de tu hijo para minimizar las distracciones.
En Clínica Internacional, tenemos a los mejores médicos especialistas en Psicología, quienes te ayudarán con el cuidado integral de tus hijos. Si deseas reservar una cita con alguno de nuestros psicólogos, puedes hacerlo a través de nuestra sección Citas en Línea.