En Clínica Internacional, sabemos que la dorsalgia es un mal que suele atacar a muchas personas. Esta aparece cuando se presentan dolores continuos en la región lumbar o zona dorsal. Por lo general, se puede producir al realizar acciones tan sencillas como cocinar, estar de pie, estar sentado, realizar hábitos rutinarios, trabajar, entre otras actividades. Por ello, te compartimos nueve formas que puedes poner en práctica para tratar la dorsalgia desde tu propio hogar.
Refresca la zona afectada
Aplicar hielo en la zona afectada durante las primeras 48 horas de haberse iniciado el dolor, reduce en gran medida la inflamación. Después de las 48 horas, puedes cambiar la temperatura y aplicar paños calientes. Esto también te ayudará a reducir las molestias. Recuerda sacar el hielo o paños cada 20 minutos para que tu piel pueda descansar. Si el dolor persiste, acude a una cita con tu doctor.
No dejes de moverte
No dejes de realizar tus actividades rutinarias como tender las camas, ir a trabajar, cocinar o sacar a pasear al perro. Cuando comiences a sentirte mejor, puedes realizar ejercicios aeróbicos como nadar, montar bicicleta o caminar, lo cual te ayudará a mantener tu espalda más ágil. Recuerda no excederte en cada actividad.
Mantente fuerte
Una vez que el dolor lumbar ha desaparecido, puedes evitar futuros episodios, ejercitando los músculos que apoyan tu espalda. Tener los músculos abdominales, pélvicos y de la cadera fuertes también te brindará mayor soporte en la espalda. Evita hacer abdominales porque solo generaría más tensión en la espalda.
Estírate
No te quedes sentado en tu escritorio durante todo el día. Levántate cada 20 minutos y estira tu cuerpo. No olvides también estirar tus piernas. Muchas personas suelen sentir alivio al realizar estiramiento rutinarios regulares, como yoga.
Piensa ergonómicamente
Diseña tu espacio de trabajo de tal forma que no tengas que encorvarte para ver la pantalla de la computadora o estirarte demasiado para alcanzar el mouse. Utiliza una silla especial de escritorio que te ayude a apoyar tu espalda y te permita mantener tus pies firmes en el piso.
Cuida tu postura
Debes ser muy cuidadoso con tu postura. Desplomarse hace más difícil que tu espalda pueda soportar tu peso. Cargar objetos pesados de forma inadecuada también altera tu postura. Nunca te inclines doblando la cintura, inclínate doblando las rodillas.
No uses tacos tan altos
Para las mujeres, usar tacones altos genera una postura aún más inestable e incrementa la presión en la columna baja. Es preferible optar por zapatos con tacos bajos o planos.
Deja los malos hábitos
Fumar aumenta el riesgo de tener osteoporosis en la columna y otros problemas en los huesos. La osteoporosis puede llevar a fracturas de compresión en la columna. Muchos estudios afirman que gran porcentaje de personas que fuman, tienden a tener dolor lumbar, en comparación con los no fumadores.
Cuida tu peso
Mantén una dieta y ejercicio moderado para que puedas mantener tu peso y talla en balance. Tener sobrepeso genera mayor tensión en la columna y en consecuencia, fuertes dolores de espalda.
Te recomendamos acudir una cita con el doctor en los siguientes casos:
- Cuando el dolor lumbar es severo, no se va después de varios días o incluso duele cuando estás echado descansando.
- Cuando hay sensibilidad o adormecimiento en las piernas, incluso cuando hay problemas para pararse o caminar.
- En caso de pérdida del control de las entrañas o vejiga.
Estas podrían ser señales claves de que hay algún problema en los nervios u otra condición médica severa, que necesita de un tratamiento para ser controlado.
En Clínica Internacional contamos con la especialidad de Traumatología, en donde podrás tratar las distintas lesiones que se producen en el aparato locomotor. Si deseas reservar una cita, puedes hacerlo a través de nuestra sección Citas en Línea.
Traducido y adaptado de WebMD por Clínica Internacional